Amen.

Más que escribir algo de una situación en mi vida, hoy quiero hacer una reflexión y tal vez algo que he estado pensando respecto a lo último que ha pasado en el mundo.

Siento que es momento de que cada uno de nosotros respiremos profundo y nos preguntemos, y claro, con toda la sinceridad del mundo nos respondamos, ¿Qué estamos haciendo con nuestras vidas? y por qué se me ha ocurrido pensar que es tiempo de que todos hagamos esto, muy sencillo, la vida es un ratico. La vida es prestada. Un abrir y cerrar de ojos. Y con todo lo que pasa en nuestro diario vivir creo que por más de que siempre pensemos en esto, es tiempo de vivir como si de verdad lo creyéramos.

En los últimos días -o siempre ha sido así- uno prende el tv y lo único que ve son catástrofes, violencia, situaciones lamentables alrededor del mundo en las que uno siempre dice, Dios mío protégeme, cuídame, o para los que no son creyentes, que rabia todo lo que pasa en el mundo, ojalá no me pase nada a mi. Y sí, ojalá Dios nos proteja, nos cuide y ojalá tampoco nada nos pase, pero claro que no estamos exentos, y esta es la razón de estas palabras.

Siempre he sido una persona muy romántica, soy fiel creyente que el amor es la fuerza más grande que mueve este mundo, y como no, esta reflexión también va en torno al amor, en este mundo en el que estamos, tan cruel, tan despiadado, es momento en que valoremos cada una de las cosas que tenemos, que podemos compartir cada plato de comida, cada prenda que tenemos, cada día nuevo en el que despertamos con salud y claro, por cada persona que esta a nuestro lado, los momentos con cada una de ellas, las risas, las tristezas, las rabias, todo de lo que hemos sido testigo.

Valorar cada cosa que tenemos no es fácil, y no es porque no estemos agradecidos por cada una de ellas, es porque simplemente se nos va la vida en un corre corre diario, de hacer vueltas, de afanes, de trajines, de pensamientos, de problemas, y claro que hay que agradecer también por todo esto, cada obstáculo nos tiene acá, y nos hizo ser quienes somos, pero a lo que voy es que lo importante de todo esto son las personas, las cuales nos comparten lo más lindo que se puede dar en esta vida, su tiempo, por favor no dejen por sentado a nadie. Abracen, besen, rían, disfruten cada una de ellas lo más que puedan, no se limiten a nada, si aman a alguien díganselo no esperen a que este mundo se las arrebate. Perdonen también a quien les hizo tanto daño, no sigan viviendo con esas cruces tan pesadas que llevan, suelten, dejen ir, sean felices que ustedes son los únicos responsables de su felicidad, no dejen que nadie se las quite, digan todo lo que han sentido por x persona, sea bueno, malo o regular, no se queden con nada que a la final eso es lo que nos llevamos, nada. Déjenlo todo acá, denlo todo por esas personas que quieren, que los acompañan y que también los quieren, no se arrepientan de nada, si no les son recíprocas todas estas actitudes por lo menos se van con la frente en alto sabiendo que lo intentaron, que más no pudieron haber dado o hecho, créanme que no hay mejor sensación que esa.

En conclusión y como frase cliché – amen, así sin tilde.